“Los grandes inventos del TBO” fue una sección humorística del celebérrimo semanario TBO donde un personaje ficticio, el profesor Franz de Copenhague, presentaba y describía los inventos más raros y estrambóticos, pero a su vez más divertidos, que hicieron las delicias de los aspirantes a ingenieros con tendencias megalómanas.
Esta exposición itinerante de producción propia fue un homenaje a la imaginación, basada en algunos de los cientos de inventos que presentó el profesor en el TBO desde 1943.
¿Un martillo pilón para romper la cáscara de un huevo? ¿Una máquina del tamaño de una habitación para cortar las uñas de los pies? ¿Un sistema para que las gallinas no pierdan los huevos? ¿Un método para dejar de roncar? Veinticinco recreaciones volumétricas a tamaño natural, realizadas en madera y cartón fallero policromado, presentaron algunos de los más disparatados e ingeniosos inventos del TBO, acompañados de los dibujos originales en los que se basaron.
Veinte montajes por toda España dan una idea de la sugerente imaginación de los diseños y de la calidad visual de los inventos. Algunos de ellos, como el realizado en la Escuela de Ingenieros de Zaragoza, han servido como propuesta de investigación para los futuros estudiantes; otros, como el de la Feria Madrid por la Ciencia, organizada por la Comunidad de Madrid, se complementaron con actividades de creación tecnológica dirigidas a los alumnos de secundaria.